

Enrique Díaz, fisioterapeuta de Promove Fisioterapia, ha colaborado con Deportista Andaluz para presentar un vídeo explicativo sobre la diferencia entre una lesión aguda y una crónica, y cómo tratarlas de manera adecuada para lograr una recuperación efectiva.
Una lesión aguda es aquella que se produce repentinamente, como una fractura o una torcedura de tobillo, y que generalmente se acompaña de dolor intenso, inflamación y limitación de la movilidad. Por otro lado, una lesión crónica es aquella que se produce de forma gradual y puede tener un origen multifactorial, como la tendinitis o la fascitis plantar.
Para tratar una lesión aguda, se recomienda aplicar hielo en la zona afectada para reducir la inflamación y el dolor, y mantener la extremidad elevada para mejorar la circulación. Además, es importante acudir a un profesional de la salud para recibir un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado.
En cuanto a las lesiones crónicas, es fundamental identificar el origen de la lesión para poder tratarla de manera efectiva. En muchos casos, las lesiones crónicas están relacionadas con factores biomecánicos, como una mala postura o un desequilibrio muscular, por lo que es fundamental realizar una evaluación completa para determinar la causa subyacente.
Para tratar las lesiones crónicas, se recomienda realizar ejercicios específicos de fortalecimiento y estiramiento, así como utilizar técnicas de terapia manual como el masaje o la liberación miofascial. Además, es importante llevar a cabo cambios en el estilo de vida, como la mejora de la alimentación y la reducción del estrés, para favorecer la recuperación.
En resumen, el vídeo presentado por Enrique Díaz en colaboración con Deportista Andaluz ofrece información valiosa sobre la diferencia entre las lesiones agudas y crónicas, y cómo tratarlas adecuadamente para lograr una recuperación efectiva. Es fundamental acudir a un profesional de la salud para recibir un diagnóstico preciso y un tratamiento personalizado, y llevar a cabo cambios en el estilo de vida para prevenir la recurrencia de las lesiones.